Descripción
Los manglares son humedales costeros que se encuentran en regiones tropicales y subtropicales. Se caracterizan por la presencia de árboles halófilos (amantes de la sal), arbustos y otras plantas que crecen en aguas salobres o salinas de las mareas. Estos humedales suelen encontrarse en los estuarios, donde el agua dulce se encuentra con el agua salada, y son famosos por su impenetrable laberinto de vegetación leñosa. En Norteamérica, se encuentran desde el extremo sur de Florida a lo largo de la costa del Golfo hasta Texas. La costa suroeste de Florida alberga uno de los mayores manglares del mundo.
Los mangles dominan este ecosistema de humedales debido a su capacidad para sobrevivir tanto en agua salada como dulce. En el territorio continental de Estados Unidos, sólo crecen tres especies de mangle: mangle rojo, negro y blanco. El mangle rojo (Rhizophera mangle) se reconoce fácilmente por sus características raíces arqueadas. El mangle negro (Avicennia sp.), que suele crecer más hacia el interior, tiene unas proyecciones de raíces llamadas neumatóforos, que ayudan a suministrar aire a la planta en suelos sumergidos. Los manglares blancos (Laguncularia racemosa) suelen crecer incluso más hacia el interior sin estructuras radiculares destacadas.
En los manglares se encuentra una gran diversidad de animales. Dado que estos pantanos estuarinos se reabastecen constantemente de nutrientes transportados por la escorrentía de agua dulce desde la tierra y arrastrados por el flujo y reflujo de las mareas, mantienen una población rebosante de bacterias y otros descomponedores y filtradores. Estos ecosistemas sustentan miles de millones de gusanos, protozoos, percebes (Balanus spp.), ostras (Crassostrea spp.) y otros invertebrados. Estos organismos, a su vez, alimentan a los peces y camarones, que mantienen a las aves zancudas, a los pelícanos y al amenazado cocodrilo.