Sheikh, también deletreado sheik, shaikh o shaykh, título árabe de respeto que data de la antigüedad preislámica; significa estrictamente un hombre venerable de más de 50 años de edad. El título de jeque lo llevan especialmente los jefes de las órdenes religiosas, los directores de las universidades, como la de Al-Azhar en El Cairo, los jefes de las tribus y los jefes de los pueblos y de los barrios de las ciudades. También se aplica a los hombres cultos, especialmente a los miembros de la clase de los ʿulamāʾ (teólogos), y se ha aplicado a cualquiera que haya memorizado todo el Corán, por muy joven que sea.
Shaykh al-jabal («el jefe de la montaña») era un término popular para designar al jefe de los Asesinos y fue traducido erróneamente por los cruzados como «el viejo de la montaña». El título más importante, con diferencia, era el de shaykh al-islām, que en el siglo XI se otorgaba a eminentes ʿulamāʾ y místicos sufíes y en el siglo XV estaba abierto a cualquier mufti (abogado canónico) destacado. En el Imperio Otomano, el uso de este título fue restringido por Süleyman I (1520-66) al muftí de Estambul, que, con el mismo rango que el gran visir, era el jefe de las instituciones religiosas que controlaban la ley, la justicia, la religión y la educación. Debido a su derecho a emitir fatwas (dictámenes jurídicos islámicos) vinculantes, este funcionario llegó a ejercer un gran poder. En 1924, bajo la República turca laica, se abolieron los últimos vestigios de la institución.