La mayoría de nosotros lo hemos experimentado. Te frotas los ojos cerrados, o estornudas, y de repente notas unos destellos o chispas de luz en tu visión. Pero, para cuando abres los ojos, ya han desaparecido. Estas pequeñas luces suelen ser fosfenos, un fenómeno visual causado por estímulos mecánicos que provocan presión o tensión en el ojo cuando los párpados están cerrados.
El revestimiento interno del globo ocular se llama retina. El trabajo de la retina es tomar la información visual que entra en el ojo a través de la pupila y convertir esta información en una señal eléctrica. La señal eléctrica se envía al cerebro para proporcionarnos la imagen visual que vemos del mundo. Los fosfenos son generados por la retina después de que haya algún tipo de estimulación, incluso con el ojo cerrado.
Algunas actividades que estimulan la retina de esta manera incluyen:
- estornudar
- levantarse demasiado rápido
- traumatismos en la cabeza
- mirar al cielo
- mover los ojos rápidamente
Por lo general, los fosfenos se describen como chispas, luces parpadeantes o formas luminosas de pinchazos que pueden ser de colores brillantes. Los fosfenos desaparecen rápidamente, en menos de unos segundos, y no causan ningún cambio en la visión.
Migrañas y auras
Los patrones visuales o las luces repentinas en su visión también pueden ser causados por migrañas oculares, o auras. Las auras suelen durar de 20 a 60 minutos y comienzan lentamente en una zona de la visión. Crecen en el transcurso de los minutos hasta causar un escotoma, o punto ciego, con los ojos abiertos o cerrados. Normalmente, las auras preceden a un dolor de cabeza o una migraña y tienen formas geométricas y colores brillantes. Una vez que el aura desaparece, la visión vuelve a ser normal.
Desgarros o desprendimientos de retina y fotopsia
Los destellos de luz, o fotopsia, que se producen con los ojos abiertos o cerrados debido a un desgarro o desprendimiento de retina se deben a un tirón mecánico de la retina. Este tirón puede causar un desgarro en la retina, separándola del globo ocular y provocando un desprendimiento. Estos destellos se observan de forma intermitente tras el desarrollo de un desgarro o desprendimiento de retina y no suelen remitir hasta que se repara. La retina no siente ningún dolor ni molestia; los destellos pueden ser una de las primeras señales de que hay un cambio en la retina. Los desgarros y desprendimientos de retina ponen en peligro la vista y deben ser evaluados inmediatamente por un oftalmólogo.
Si le preocupan las luces que ve en su visión o tiene nuevos destellos de luz, es necesario realizar un examen oftalmológico completo con dilatación. Incluso si no tiene ningún cambio en la visión o no usa gafas o lentes de contacto, se recomienda un examen ocular con dilatación anual para evaluar la salud de la retina antes de que se desarrolle cualquier problema.
Stephanie Pisano es optometrista en el Centro Médico Wexner de la Universidad Estatal de Ohio.