Libia, un país mayoritariamente desértico y rico en petróleo con una historia antigua, ha sido conocido más recientemente por los 42 años de gobierno del mercurial coronel Muammar Gaddafi – y el caos que ha seguido a su salida.
Libia estuvo bajo dominio extranjero durante siglos hasta que obtuvo la independencia en 1951. Poco después se descubrió el petróleo, que hizo ganar al país una inmensa riqueza.
El coronel Gadafi se hizo con el poder en 1969 y gobernó durante cuatro décadas hasta que fue derrocado en 2011 tras una rebelión armada ayudada por la intervención militar occidental.
En los últimos años, el país ha sido un trampolín clave para los migrantes que se dirigen a Europa, y una fuente de tensión internacional, ya que los gobiernos rivales del oeste y del este tratan de establecer un control nacional.
- Ver más perfiles de países – Perfiles recopilados por BBC Monitoring
LÍDERES
El derrocamiento del líder de larga duración Muammar Gaddafi en 2011 provocó un vacío de poder e inestabilidad, sin que ninguna autoridad tenga el control total.
El país se ha escindido, y desde 2014 está dividido en facciones políticas y militares que compiten entre sí, con sede en Trípoli y en el este.
Los principales líderes son el primer ministro Abdul Hamid Dbeibeh, jefe del gobierno reconocido internacionalmente en Trípoli, y Khalifa Haftar, líder del Ejército Nacional Libio, que controla gran parte del este y el sur de Libia.
El grupo Estado Islámico aprovechó brevemente el conflicto para hacerse con el control de varias ciudades costeras, incluida Sirte. Mantiene su presencia en el interior del desierto.