La hormona estimulante de los melanocitos (MSH), también llamada intermedina o melanotropina, es uno de varios péptidos derivados de una proteína conocida como proopiomelanocortina (POMC) y secretada principalmente por la glándula pituitaria. En la mayoría de los vertebrados, los péptidos de la hormona estimulante de los melanocitos (MSH) son secretados específicamente por el lóbulo intermedio de la hipófisis y funcionan principalmente en el oscurecimiento de la piel, con una serie de otras actividades menores.
Encyclopædia Britannica, Inc.
Los péptidos de la MSH incluyen la α-MSH, la β-MSH y la γ-MSH. Se distinguen entre sí por su unión preferente a diferentes receptores de melanocortina (MCR), a través de los cuales ejercen sus efectos, y por su estructura, ya que cada uno surge de una región diferente de la POMC. El péptido α-MSH, por ejemplo, se deriva de la región media de la POMC, mientras que la β-MSH se deriva del C-terminal (el extremo que contiene un grupo carboxilo) y la γ-MSH del N-terminal (el extremo que contiene un grupo amina). Otro péptido que se produce a partir de la escisión de la POMC es la hormona adrenocorticotrópica (ACTH), que se puede volver a escindir para formar la α-MSH. El péptido α-MSH contiene 13 aminoácidos, que se encuentran en la misma secuencia en todas las especies estudiadas. La β-MSH y la γ-MSH varían en longitud y secuencia. Se cree que las diferentes secuencias de aminoácidos de los péptidos de la MSH explican su capacidad para activar diferentes MCR.
Después de la secreción de la hipófisis, la MSH circula por la sangre y se une a los MCR en la superficie de las células que contienen pigmentos, llamadas melanocitos (en humanos) y cromatóforos (en vertebrados inferiores). La consiguiente activación de los MCR provoca un aumento de las concentraciones de pigmento de melanina y altera su distribución dentro de las células. En los seres humanos, este proceso se manifiesta sobre todo en forma de oscurecimiento de la piel, y la exposición a la luz solar sirve de estímulo para la producción y secreción de MSH. Efectos similares se observan en los anfibios, en algunos peces y en los reptiles, en los que la MSH regula la síntesis de melanina en las células conocidas como melanóforos (un tipo de cromatóforo) y permite a los animales adaptar su coloración a su entorno. En estas especies, la pigmentación de la piel impulsada por la MSH suele producirse a través de la estimulación de los fotorreceptores (por ejemplo, de la luz que se refleja en la superficie del agua), la activación de la hipófisis y la liberación de MSH. Sin embargo, la producción local de MSH en la piel, a través de la comunicación célula-célula (señalización paracrina), sin la participación de la glándula pituitaria, también puede mediar los cambios en la pigmentación de la piel. Los péptidos de la MSH también pueden ser liberados por las neuronas que se originan en el núcleo arqueado y otras regiones del cerebro, donde actúan en las vías que controlan la alimentación y el gasto energético. En los mamíferos, se sabe que la MSH suprime el apetito.
Las enfermedades que pueden atribuirse a la secreción insuficiente o excesiva de MSH no están bien definidas en los seres humanos. Se sospecha que la deficiencia de α-MSH en las neuronas POMC contribuye a la fisiología desordenada que caracteriza a la diabetes mellitus tipo 2.