Es posible que quieras tirar tu comida si una mosca se posa en ella, ya que babean, vomitan y se cagan en ella. También pueden transmitir más de 100 enfermedades diferentes.
Según un estudio realizado en 2017, las moscas suelen pasar su tiempo en la basura y los desechos de los animales, donde recogen patógenos en sus patas, que se transferirán a cualquier superficie en la que se posen. Las moscas tampoco tienen dientes, por lo que comen escupiendo y vomitando sobre su comida. Un compuesto de su saliva y vómito descompone la comida para que la mosca pueda sorberla. Mientras una mosca come, suele hacer caca y, si es una hembra, también puede poner huevos.
Cuanto más tiempo esté una mosca en tu comida, más posibilidades hay de que se le transfieran bacterias, virus y parásitos dañinos. Si una mosca se posa en su comida y la mata de inmediato, es probable que la comida sea segura para comer. Pero si quieres ir a lo seguro, y asegurarte mejor de que ningún horrible agente patógeno ha acabado en ella, es mejor que la tires. Las moscas son molestas para empezar, pero aprender lo que son capaces de hacer a su comida las hace aún más indeseables.