El atragantamiento por saliva ocasionalmente puede no ser motivo de preocupación. Pero si ocurre con frecuencia, identificar la causa podría prevenir futuras ocurrencias. Las posibles causas de atragantamiento con saliva incluyen:
Reflujo ácido
El reflujo ácido se produce cuando el ácido del estómago fluye hacia el esófago y la boca. A medida que el contenido del estómago fluye hacia la boca, la producción de saliva puede aumentar para eliminar el ácido.
El reflujo ácido también puede irritar el revestimiento del esófago. Esto puede dificultar la deglución y permitir que la saliva se acumule en la parte posterior de la boca, causando asfixia.
Otros síntomas del reflujo ácido incluyen:
- Acidez de estómago
- Dolor en el pecho
- Regurgitación
- Náuseas
- Nudo visible en la garganta
- Ronquera
- Dolor de garganta
- debilidad muscular
- espasmos musculares en otras partes del cuerpo
- dificultad para hablar
- alteración de la voz
- dolor de garganta
- estornudos
- tus
- nariz congestionada
- clozapina (Clozaril)
- aripiprazol (Abilify)
- ketamina (Ketalar)
Su médico puede diagnosticar la enfermedad de reflujo ácido mediante una endoscopia o un tipo especial de radiografía. El tratamiento puede incluir antiácidos de venta libre o recetados para reducir la acidez estomacal.
Deglución anormal relacionada con el sueño
Se trata de un trastorno en el que la saliva se acumula en la boca mientras se duerme y luego fluye hacia los pulmones, lo que provoca aspiración y asfixia. Puede despertarse jadeando y ahogándose con la saliva.
Un estudio antiguo teoriza que puede haber una relación entre la deglución anormal y la apnea obstructiva del sueño. La apnea obstructiva del sueño es cuando la respiración se detiene mientras se duerme debido a que las vías respiratorias son demasiado estrechas o están bloqueadas.
Una prueba de estudio del sueño puede ayudar a su médico a diagnosticar la apnea obstructiva del sueño y la deglución anormal. El tratamiento incluye el uso de una máquina CPAP. Esta máquina proporciona un flujo de aire continuo mientras se duerme. Otra opción de tratamiento es un protector bucal. El protector se lleva mientras se duerme para mantener la garganta abierta.
Lesiones o tumores en la garganta
Las lesiones o tumores benignos o cancerosos en la garganta pueden estrechar el esófago y dificultar la deglución de la saliva, desencadenando la asfixia.
Su médico puede utilizar una prueba de imagen, como una resonancia magnética o una tomografía computarizada, para comprobar si hay lesiones o tumores en la garganta. El tratamiento puede consistir en la extirpación quirúrgica de un tumor, o en la administración de radiación o quimioterapia para reducir los crecimientos cancerosos. Otros síntomas de un tumor pueden ser:
Dentaduras postizas mal ajustadas
Las glándulas salivales producen más saliva cuando los nervios de la boca detectan un objeto extraño como la comida. Si llevas dentadura postiza, tu cerebro podría confundirla con comida y aumentar la producción de saliva. Un exceso de saliva en la boca podría provocar un atragantamiento ocasional.
La producción de saliva puede disminuir a medida que su cuerpo se adapte a la dentadura postiza. Si no es así, consulte a su médico. Es posible que su dentadura postiza sea demasiado alta para su boca o que no se ajuste a su mordida.
Trastornos neurológicos
Los trastornos neurológicos, como la enfermedad de Lou Gehrig y la enfermedad de Parkinson, pueden dañar los nervios de la parte posterior de la garganta. Esto puede provocar dificultad para tragar y ahogarse con la saliva. Otros síntomas de un problema neurológico pueden ser:
Los médicos utilizan una variedad de pruebas para comprobar si hay trastornos neurológicos. Entre ellas se encuentran las pruebas de imagen, como la tomografía computarizada y la resonancia magnética, así como las pruebas nerviosas, como la electromiografía. Una electromiografía comprueba la respuesta muscular a la estimulación nerviosa.
El tratamiento depende del trastorno neurológico. El médico puede recetar medicamentos para reducir la producción de saliva y enseñar técnicas para mejorar la deglución. Los medicamentos para reducir la secreción de saliva incluyen el glicopirrolato (Robinul) y la escopolamina, también conocida como hioscina.
Consumo excesivo de alcohol
La asfixia en la saliva también puede producirse tras un consumo excesivo de alcohol. El alcohol es un depresor. Consumir demasiado alcohol puede ralentizar la respuesta muscular. Estar inconsciente o incapacitado por consumir demasiado alcohol puede hacer que la saliva se acumule en la parte posterior de la boca en lugar de fluir por la garganta. Dormir con la cabeza elevada puede mejorar el flujo de saliva y prevenir el atragantamiento.
Hablar en exceso
La producción de saliva continúa mientras hablas. Si hablas mucho y no te detienes a tragar, la saliva puede bajar por la tráquea hasta el sistema respiratorio y provocar un atragantamiento. Para evitar el atragantamiento, habla despacio y traga entre frases u oraciones.
Alergias o problemas respiratorios
La mucosidad o saliva espesa provocada por alergias o problemas respiratorios puede no bajar fácilmente por la garganta. Mientras duerme, la mucosidad y la saliva pueden acumularse en la boca y provocar asfixia.
Otros síntomas de alergias o de un problema respiratorio incluyen:
Toma un antihistamínico o un medicamento para el resfriado para reducir la producción de moco y diluir la saliva espesa. Consulte a su médico si tiene fiebre o si sus síntomas empeoran. Una infección respiratoria puede requerir antibióticos.
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Hipersalivación durante el embarazo
Los cambios hormonales durante el embarazo provocan náuseas extremas y náuseas matutinas en algunas mujeres. La hipersalivación a veces acompaña a las náuseas, y algunas mujeres embarazadas tragan menos cuando tienen náuseas. Ambos factores contribuyen a un exceso de saliva en la boca y a la asfixia.
Este problema puede mejorar gradualmente. No hay cura, pero beber agua puede ayudar a lavar el exceso de saliva de la boca.
Hipersalivación inducida por fármacos
Algunos medicamentos también pueden desencadenar una mayor producción de saliva. Estos incluyen:
También puede experimentar babeo, dificultad para tragar y ganas de escupir.
Hable con su médico si la producción excesiva de saliva le provoca asfixia. Su médico puede cambiar su medicación, modificar su dosis o recetarle un medicamento para reducir la producción de saliva.