Ingredientes principales
Para empezar, hablemos del factor más obvio. El café y las bebidas energéticas se componen de ingredientes muy diferentes.
Café. Este es el estimulante más utilizado para ambas bebidas. Sin embargo, como ya se ha dicho, el café «generalmente» tiene más cafeína que las bebidas energéticas. Decimos «generalmente» porque hay algunas excepciones notables a este hecho, como cuando las empresas de bebidas energéticas desarrollan a propósito una variante de su bebida enriquecida con cafeína con fines de marketing. Hay muchos estudios que están a favor o en contra de los efectos de la cafeína. Sin embargo, la mayoría coincide en que la cafeína tiene efectos beneficiosos a corto plazo, por ejemplo, mejora la concentración, y puede consumirse de forma segura en dosis controladas.
Azúcar. El azúcar puede ser opcional para el café, pero nunca para las bebidas energéticas. De hecho, una bebida energética media puede llegar a tener 78 gramos o la friolera de 20 cucharaditas de azúcar por lata. Además, el azúcar se añade como fuente de energía, no como estimulante. La tasa de conversión metabólica normal del azúcar de mesa es de unos 15 minutos, pero otros factores, como la cantidad consumida y la presencia de estimulantes, aceleran el proceso. Esto da lugar a una explosión de energía que suele denominarse «subidón de azúcar»
Las empresas de bebidas energéticas han intentado resolver la prensa negativa sobre el azúcar de sus productos utilizando edulcorantes artificiales en su lugar. Sin embargo, sigue habiendo riesgos asociados a los edulcorantes artificiales, ya que algunos estudios los declaran cancerígenos y alérgenos.
Vitamina B12. Tu cuerpo necesita vitamina B12 para convertir la glucosa en energía, pero como tu cuerpo no puede producir vitamina B12 por sí mismo, necesitas tenerla en tu dieta, o al menos eso dice el reclamo de marketing.
Desgraciadamente, dicho reclamo no es del todo exacto. Aunque es cierto que su cuerpo no puede producir vitamina B12 por sí mismo, la mayoría de las personas ya obtienen la cantidad que necesitan al comer carne, huevos, verduras y productos lácteos. Una vez que el cuerpo consume suficiente vitamina B12, el resto se desecha. Por lo tanto, siempre que no sufra desnutrición, parece poco probable que necesite tomar un suplemento de vitamina B12 como los que contienen las bebidas energéticas.
Taurina. La taurina es un aminoácido esencial que se produce de forma natural en el cuerpo humano, suministrado por una buena dieta. Sus efectos sobre la salud cardiovascular aún no se han establecido del todo, lo que ha llevado a algunos países a prohibir esta sustancia. Sin embargo, algunas empresas de bebidas energéticas siguen añadiéndola a sus productos, posiblemente para contrarrestar los síntomas relacionados con la ansiedad que puede provocar un exceso de cafeína. No aumenta el impulso energético, sino que apacigua los posibles efectos secundarios negativos.
Antioxidantes. El café no sólo contiene cafeína, sino un centenar o más de compuestos que son transportados por los granos originales o liberados a través del proceso de tostado. Algunos de estos compuestos son antioxidantes, de los que se cree que tienen efectos positivos en la salud cardiovascular y podrían reducir el riesgo de cáncer. Las bebidas energéticas, sin embargo, apenas tienen antioxidantes.