¿Qué tienen en común los pianistas, los guitarristas y los mecanógrafos?
Bueno… ¡Tienen dos manos! Jaja
La ambidestreza es la razón detrás de cómo llegaron a ser más rápidos que tú y yo.
Si estás leyendo esto, lo más probable es que tú también quieras convertirte en ambidiestro, como hice yo durante mis vacaciones de verano.
Así que aquí está la solución: Aprende a usar tus manos no dominantes igual de bien que las dominantes
y la mayoría de la gente no lo sabe pero… Esta es una habilidad totalmente aprendible. Te lo puedo garantizar porque yo mismo soy uno de ellos – Escribiendo esto con todas mis manos.
Ahora…
Imagínate jugando al bádminton con las dos manos; escribiendo con las dos manos, y cualquier otro deporte con las dos manos
Apuesto, que nunca perderás una pelota.
Si te pregunto: ¿Cuándo fue la última vez que viste a una persona ambidiestra?
¿No lo recuerdas?
¡Deja que te ayude!
Todos estos hombres son ambidiestros, y creo que también habría mujeres, ¡porque cualquiera puede hacerlo!¡
Cuando inventores y genios creativos como Nikola Tesla y Leonardo da Vinci son ambidiestros, entonces debe haber algo especial en esta habilidad!
Y esto podría asombrarte pero…
Cuando las personas ambidiestras son tan raras y únicas ¿qué se necesita para lograr este equilibrio entre sus dos hemisferios cerebrales derecho e izquierdo?
Se trata de entrenar tu mano izquierda para que sea tan fuerte y flexible como tu mano derecha a través de un uso repetido.
Y la forma en la que puedes hacer esto, es la misma forma en la que desarrollas los músculos: yendo al gimnasio.
¡Vas a experimentar una ligera incomodidad y eso está bien!
Todo lo que merece la pena hacer es incómodo y difícil al principio, así que ten paciencia
Lávate los dientes con la mano nomano dominante
El primer día será un asco pero mejorarás con cada día
y después del tercer día serás completamente normal
Usa la mano izquierda para escribir en el teléfono
No sólo el pulgar sino también los dedos
Lo sé, Sé que esto necesita mucha actualización pero los enlaces dados y la dedicación son suficientes para que te vuelvas ambidiestro.