Un perro que camina de lado puede ser una preocupación para los propietarios de perros, especialmente cuando el perro comienza a caminar de esta manera de la nada. Puede haber varias causas subyacentes para que un perro camine de lado y la mejor manera de encontrar la causa subyacente es acudiendo al veterinario. Una grabación del episodio puede ser de gran ayuda para que el veterinario tenga una visión del comportamiento real en lugar de una mera descripción. Los casos complicados pueden requerir la remisión a un neurólogo. A continuación se presentan algunas causas potenciales para un perro que camina de lado junto con la información pertinente sobre el diagnóstico y el tratamiento.
Un problema con el oído
Un perro que camina de lado puede estar sufriendo de algún problema con los oídos. Los oídos de un perro y su sentido del equilibrio están estrechamente conectados.
El equilibrio, que ayuda al perro a caminar y correr sin caerse, se controla a través de señales especiales enviadas al cerebro que provienen de los ojos, el oído interno y otros sistemas sensoriales del cuerpo. El oído interno del perro, en particular, contiene «sensores» especiales que son capaces de detectar el movimiento de rotación de la cabeza.
El sistema de equilibrio de su perro suele denominarse sistema vestibular y cualquier problema que afecte a este sistema se conoce como trastorno vestibular.
Las infecciones del oído medio o del oído interno pueden afectar al sistema vestibular del perro, haciendo que los perros afectados se sientan mareados y con náuseas, como si se hubieran bajado de un tiovivo. Esto puede llevar a que el perro muestre una inclinación de la cabeza, dando vueltas y caminando de lado por estar mareado, lo que lleva a un perro que se siente enfermo, con náuseas y puede negarse a comer.
Esta condición se conoce como enfermedad vestibular, y aunque puede ser causada por una infección del oído medio, a veces la causa sigue siendo desconocida (idiopática). Debido a que esta condición se ve a menudo en perros de edad avanzada, a menudo se conoce como enfermedad vestibular geriátrica o enfermedad vestibular del perro viejo.
Una resonancia magnética o una tomografía computarizada puede ser necesaria para diagnosticar esta condición, pero debido a los costos asociados con estos procedimientos, muchos veterinarios pueden optar por tratar al perro sintomáticamente y ver si el problema se resuelve. El veterinario puede recetar medicamentos contra las náuseas y, si hay una infección en el oído medio, un tratamiento con antibióticos y antiinflamatorios. Para tratar el mareo, el veterinario puede sugerir meclizina. Generalmente, los perros mejoran en 1 o 2 semanas.
«El síndrome vestibular idiopático. puede ocurrir en perros que envejecen y generalmente se presenta con tropiezos, movimiento de los ojos (llamado nistagmo- realmente mira de cerca para un movimiento de los ojos hacia adelante y hacia atrás – puede ser sutil), inclinación de la cabeza y debilidad. La buena noticia es que la mayoría de estos perros se recuperan en un par de semanas.»~Dr. Jeff
Posible dolor no detectado
Los perros a menudo no expresan el dolor de la manera que esperamos. Por lo tanto, caminar de lado (también conocido como «crabbing» en la jerga canina) puede ser la forma que tiene un perro de compensar el dolor originado en algún lugar. Por ejemplo, un perro puede caminar de lado en caso de molestias derivadas de una distensión, un esguince o una contusión.
Además de caminar de lado, el dolor en los perros puede manifestarse a través del jadeo y la respiración rápida. Este dolor puede seguir a un ejercicio vigoroso, apareciendo unas 12 horas más tarde o el dolor puede surgir como resultado de girar o torcer algo «de la manera equivocada».
Tal vez el dolor se localiza en el cuello del perro, afectando más precisamente, el área cervical del perro, o el problema puede provenir de la columna vertebral, posiblemente debido a la hernia de disco. Las radiografías, a menos que la afección sea evidente, no suelen mostrar signos de hernia discal ni en el cuello ni en la espalda. El perro necesitará una resonancia magnética, una tomografía computarizada o un mielograma para el diagnóstico.
Otras fuentes de dolor que hacen que el perro camine de forma extraña pueden incluir las rodillas del perro, las caderas, la columna vertebral, el abdomen y a veces incluso las glándulas anales del perro. En algunos casos, las glándulas anales del perro pueden quedar impactadas, lo que hace que se vuelvan dolorosas a medida que se llenan y expanden. Este dolor puede hacer que el perro camine de forma extraña.
Si el veterinario sospecha que hay dolor muscular, dolor de cuello o dolor de espalda, puede recetar un tratamiento de antiinflamatorios no esteroideos junto con reposo y ver si los síntomas remiten. En el caso de las hernias discales, el veterinario puede recetar además otros analgésicos (gabapentina, tramadol) y, posiblemente, relajantes musculares. Los casos graves pueden requerir una intervención quirúrgica.
Otras posibles causas
Un perro que camina torcido, de lado, puede estar sufriendo un problema hepático. En particular, los perros pequeños son propensos a una condición conocida como derivación hepática. Los análisis de sangre, incluyendo una prueba especial conocida como Prueba de Ácidos Biliares, pueden ayudar a diagnosticar esta condición.
Si el episodio del perro que camina torcido es temporal, puede haber posibilidades de que el episodio haya sido una convulsión. Cuando alguien piensa en las convulsiones de los perros, la primera idea que puede venir a la mente es la de un perro tumbado y trasteando con las patas en el aire, pero las convulsiones de los perros pueden ser mucho más sutiles que esto.
Las convulsiones parciales pueden causar una actividad cerebral anormal y esto puede afectar temporalmente al movimiento del perro. Mientras que las convulsiones son más comunes en los perros jóvenes, en los perros de edad avanzada las enfermedades sistémicas o incluso los tumores pueden ser un culpable de las convulsiones y por lo tanto deben requerir una investigación.
En un perro de edad avanzada, la posibilidad de un tumor cerebral debe ser considerada como una causa potencial para caminar de lado. La forma definitiva de diagnosticar un tumor cerebral en un perro es a través de una resonancia magnética.
En los perros pequeños existe la posibilidad de que un nivel bajo de glucosa en sangre sea la causa de la marcha lateral. En tal caso, puede ayudar frotar miel, jarabe de karo o jarabe de panqueques en las encías (asegurándose de que estos productos no contienen xilitol, un edulcorante artificial que es altamente tóxico para los perros.)
Un perro que corre de lado todo el tiempo y no parece estar sufriendo o en cualquier dolor, puede estar caminando de esta manera debido a algún problema estructural. Este curioso modo de andar puede verse en perros que tienen problemas estructurales que les hacen caminar de forma lateral para evitar que sus patas se toquen.
Otras causas potenciales para que un perro camine de lado pueden incluir la ingestión de toxinas dañinas, como plantas, drogas, pesticidas o herbicidas y otros elementos no comestibles, un accidente cerebrovascular, o algún tipo de problema vascular en el cerebro, los efectos secundarios de ciertos medicamentos y más.
Como se ha visto, hay varias causas para que un perro camine de lado. Por ello, es muy recomendable acudir al veterinario para que diagnostique correctamente a tu perro y pueda recibir el tratamiento más adecuado.
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