Resumen del tema
Decidir interrumpir un embarazo nunca es fácil. Cada mujer tiene un motivo diferente para abortar, y las reacciones emocionales son comunes. Después de un aborto, es normal sentir alivio, tristeza, pena o culpa. Estos sentimientos pueden cambiar de una mujer a otra.
Los cambios hormonales naturales que se producen en tu cuerpo durante el embarazo se ven afectados por un aborto. Estos cambios hormonales pueden hacer que se sienta más emocional de lo habitual. Puede experimentar un espectro de sentimientos, que van desde la tristeza, la ira y el arrepentimiento hasta la culpa o el alivio. De hecho, los cambios hormonales pueden provocar síntomas de depresión, como falta de sueño (insomnio), tristeza, llanto, ansiedad, desesperanza, irritabilidad y falta de concentración. Los síntomas duraderos requieren atención profesional.
Es normal pasar por un proceso de duelo después de un aborto, independientemente del motivo del mismo. La intensidad y duración de los sentimientos emocionales varían de una mujer a otra y pueden verse afectados por los cambios hormonales en esa etapa del embarazo. La mayoría de las mujeres se recuperan en un tiempo bastante corto.
Un pequeño número de mujeres tienen reacciones emocionales prolongadas después de haber abortado. Si tiene sentimientos prolongados de tristeza, culpa o depresión, asegúrese de hablar de sus sentimientos con un familiar o amigo que la apoye, con un consejero profesional o con su profesional de la salud.
El asesoramiento en las primeras etapas del embarazo es importante para obtener un resultado positivo al elegir un aborto. El asesoramiento puede ayudarle a identificar y gestionar sus emociones sobre su elección. Esto puede reducir el riesgo de tener problemas emocionales meses o años después del aborto.